LA ESQUINA CALIENTE
ASÍ NO MAGALI

A días del Miss República Dominicana 2025, Andreína Martínez decidió hablar. Y lo que dijo no fue poca cosa. Por si no recuerdas, Andreína representó al país en Miss Universo 2022 y casi casi CASI nos trae la corona porque quedó segunda finalista. Ahora contó en un podcast que su paso por el certamen fue una pesadilla.

Si no eres muy fan de los concursos, lo básico es esto: para participar en Miss Universo —el certamen donde se elige a la mujer “más bella del mundo”—, cada país tiene que escoger a su representante. En el caso de República Dominicana, eso se hace a través del Miss República Dominicana. La que gana, es la que va a competir por la corona internacional.

Andreína ganó la corona nacional en 2021, pero no fue al Miss Universo ese año porque, según dijeron, le dio covid justo antes de viajar. Al final, fue en 2022, se robó el show y el corazón del “universo”. Todo el mundo pensaba que por fin venía la segunda corona después de Amelia Vega (2003). Pero Estados Unidos nos quitó eso.

El contrato 

Andreína confesó que para poder ir a Miss Universo, la organización del Miss República Dominicana la obligó a firmar un contrato de tres años. No le permitieron revisarlo con abogados y le dijeron que si no firmaba, no iba.

Básicamente, el contrato dice que ellos se quedan con el 30 % de todo lo que ella genere a nivel comercial. Ella no podía aceptar campañas ni propuestas sin su aprobación y aunque le llegaban oportunidades, muchas veces no se las aprobaban o simplemente no le respondían. En pocas palabras “la bloquearon” o “la engavetaron”, que fue un infierno y que muchos se beneficiaron a costilla de su talento. 

Esto no es nuevo 

Larimar Fiallo, que ganó el Miss Republica en el 2004, le echó leña al fuego. Publicó en sus redes que muchas jóvenes firman esos contratos abusivos sin entender lo que están haciendo. Y que cuando vienen a reaccionar, ya es demasiado tarde. Hasta dio la primicia de que una miss grabó un documental donde salieron varias participantes contando su testimonio y que espera que salga pronto. 

Aconsejó al pueblo a que no permitan que ni sus hijas, sobrinas o cualquier mujer dominicana participen hasta que no cambien la organización. Y que ella puede hablar sin miedo porque sus abogados y su familia le hicieron pila de cambios a su contrato y como no se las aceptaron, no lo firmó. 

Clarissa Molina también tuvo su lío. En 2022 contó que su paso por el Miss RD fue el Niágara en bicicleta, que su familia tuvo que pagar todo para llevarla al Miss Universo y que Magali Febles, la directora del concurso, nunca cumplió el contrato. Años después, cuando ganó Nuestra Belleza Latina VIP, Magali dijo que le había dado permiso para competir con el acuerdo de recibir el 30 % del premio. Clarissa negó ese trato y fue clara: “a la señora no se le debe nada”.

Hablando de la señora

Magali Febles es directora del concurso desde hace más de 20 años. Jary Ramírez dice que “RD es el único país donde una mujer horrorosa y fea tiene un concurso de belleza”.

Pero ¿quiénes somos nosotros para juzgar? La verdad es que Magali no es santo de la devoción de nadie porque siempre está en un lío y no hay una edición del Miss RD que ella se vaya en blanco. 

Incluso este año sonó que le ofrecieron a Karen Yapoort comprar la franquicia del Miss RD por 250 mil dólares pero que no le veía retorno. Aunque después Magali y la organización lo desmintieron. Jum. 

Esta vez, respondió rápido. Dijo que le dolió lo que dijo Andreína y que le parece sospechoso que hablara justo esta semana, a tres días del concurso. A Magali se le fue la lengua y admitió que ella misma fue quien “enfermó de covid” a Andreína para que no fuera al Miss Universo en 2021. Según Magali, Andreína no estaba lista y si la mandaban como ganó aquí, no iba a llegar para parte. Dijo que había hasta que arreglarle los dientes y la cara. De hecho, aquí se ve la diferencia con el uso de fillers.

Encima de eso, le echó la culpa de no haber ganado porque no siguió la estrategia que la Maga le hizo. Dizque se soltó el pelo cuando debía llevarlo recogido y que habló del aborto cuando debía quedarse neutral. “Yo la vi salir al escenario y dije: ya perdimos”, dijo.

Para Magali, ese contrato de tres años es paja de coco en comparación con los contratos de por vida que se manejan en algunas agencias de modelaje y que ella se merece ganarse sus chelitos después de toda la inversión que hizo en ella. Pero, para participar en el Miss RD cada candidata tiene que pagar y costear todo…

El fuetazo muchas lo dan porque es una plataforma trampolín para exponerte. Por ejemplo han participado: Milagros Germán, Mariasela Álvarez, Georgina Duluc, Selinée Méndez, Luz García, Amelia Vega, Pamela Sued, Isaura Taveras, Caroline Aquino, Colombia Alcántara, Massiel Taveras, Marianne Cruz, Jenny Blanco, Gabi Desangles, Karen Yapoort, Liza Blanco, etc.

Esta edición 

Promete. Ya Magali había bajado flow PLD diciendo que hará lo que nunca se ha hecho. La verdad es que esta edición será en el Teatro Nacional y estará presente la actual Miss Universo, Victoria Kjær Theilvig, que es de Dinamarca y más blanca que la harina. Hasta le hará también su visita a Abi. 

Las candidatas están ensayando, preparándose para la gala preliminar de esta noche. Por si no sabes, esa gala preliminar —que no es televisada— es la razón por la que empiezan a descalificar o a elegir gente desde que te sientas a ver el Miss RD En esa fase, evalúan a las candidatas y aunque el jurado selecciona a las semifinalistas ese día esa lista se anuncia en la final.

La gala final es este domingo 10 de agosto a las 9:00 p. m. con transmisión en Color Visión (canal 9) y en el canal de YouTube de Miss Universo. El presentador de Telemundo, Clovis Nienow, y la comunicadora, Jessica Pereyra, están a cargo de la conducción. Y Bulin 47, tesoro nacional, abrirá el show. 

Los ojos están puestos en RD este año porque habrá dos dominicanas en el Miss Universo 2025, que será en noviembre en Tailandia. Una será la ganadora del Miss República Dominicana y la otra es Yamilex Hernández, quien ganó hace poco el reality Miss Universe Latina de Telemundo y representará oficialmente a la comunidad latina. Hasta ella estará presente en la coronación este domingo. 

Para ver el concurso, es tradición elegir a tus favoritas. Nos ponemos alante y te contamos las nuestras: 

• Miss Barahona - Jennifer Ventura 

• Miss Punta Cana - Jearmanda Ramos 

• Delisa Francisco - María Trinidad Sánchez 

Y claro, el equipo de El Brifin y La Magacín estará tirándose esto en nuestro viewing party patrocinado por Hyundai que tendremos en Hoyo 20, en el segundo piso de Acrópolis. Vamos a brindar con traguitos temáticos, rifas y hablar mucha plepla.  Si no reservaste, probablemente te estarás muriendo del FOMO porque hasta Alfonso Rodríguez va. Puedes darte una vuelta y entrar por orden de llegada según haya disponibilidad.

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LA ESTRELLA DE LA SEMANA
LINDSAY LOHAN

Qué linda está Lindsay. Con ese glow, la piel lisa, la sonrisa perfecta. Tiene 39 años, pero parece que viajó en el tiempo. En vez de envejecer, rejuveneció. Algunos dicen que es skincare, otros que es bisturí. Pero lo cierto es que se ve renovada, tranquila y feliz. Y justo cuando vuelve con una de sus pelis más icónicas.

Lindsay Lohan está oficialmente de vuelta. Esta semana se estrenó en Londres la secuela de Freaky Friday, la película de 2003 donde cambió de cuerpo con Jamie Lee Curtis y se ganó un espacio en el corazón de una generación. Ahora, 21 años después, Lindsay repite su papel como Anna Coleman, pero con una nueva vida dentro y fuera de la pantalla. Y por eso, está en boca de todos.

Para los que no la tienen ubicada: Lindsay fue una niña estrella de los 2000. Se robó el show a los 12 años en The Parent Trap, siguió en hits como Life-Size, Confessions of a Teenage Drama Queen y, claro, Mean Girls, que la consagró como ícono pop. Pero en el pico de su carrera, su nombre dejó de sonar por sus películas y empezó a llenar portadas por su vida caótica: fiestas, adicciones, arrestos, rehabilitación y una lista de proyectos fallidos que la sacaron del juego.

Después de eso, se mudó a Dubái, encontró cierta estabilidad, se casó, tuvo un hijo, y empezó poco a poco a reconstruir su carrera. Hizo películas navideñas con Netflix, se alejó de los escándalos y ahora vuelve con una cinta que mezcla nostalgia y comedia familiar.

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